¿Pena vivir en México?
He escuchado a algunos mexicanos decir - ante el tema de la inseguridad, los cambios a la Reforma y otros temas de ese tipo - que les da pena vivir en México.
¿Pena vivir en México?, debería darnos orgullo por lo abundante y basto que es nuestro país y debería darnos rabia revolucionaria (no hablo de tomar las armas, sino de una re-evolución de la conciencia), nos debería dar coraje por defenderlo, sí, a México y todo lo que ello significa, lo que debiéramos sentir es un impulso incontrolable de unirnos y hacer algo, pero estamos tan ocupados en redes sociales difundiendo chistes de lo bruto que es Peña Nieto o en nuestras cosas rutinarias y triviales que representan nuestra zona de confort que no nos queda tiempo para hacer algo, o es más importante la final de futbol y tantas distracciones que elegimos cómodamente porque no sentimos amor por México.
Yo recuerdo un país al que llamaban el cuerno de la abundancia, recuerdo un país que se levantaba impresionantemente ante desastres naturales como el terremoto del 85, no hace falta irnos tan lejos a tiempos de Emiliano Zapata. Recuerdo la UNIÓN y la valentía de masas de mexicanos apoyándose sin importar nada, recuerdo a un Placido Domingo metido entre los escombros ayudando y recuerdo que nos llenábamos de orgullo de ser Mexicanos, se sentía esa sensación contagiosa de apoyarnos y se inflamaba en el pecho con cada fruto de esa fuerza conjunta, por mencionar algo.
El México de mis recuerdos es un país con impresionantes bellezas naturales, culturales y sociales, que tiene la más grande variedad de especies animales y vegetales, donde las culturas son tan diversas y a la vez tan apegadas a la espiritualidad, a sus creencias y a la fraternidad, donde las sociedades se olvidaban de niveles a la hora de la adversidad o los triunfos, donde afloraba lo más valioso de la esencia del mexicano... Su nobleza.
Quiero expresar hermanos mexicanos, que México nunca ha sido el Gobierno, ni un Lázaro Cárdenas ni un Benito Juárez y mucho menos un Peña Nieto ni toda la basura política que lleva éste detrás y de quienes recibe instrucciones irrebatibles. México somos nosotros, los que decimos que nos da pena vivir aquí y estamos más dormidos que despiertos, hipnotizados y atarantados por la maraña de distractores con los que nos dejamos mansamente alimentar, el bruto no es Peña Nieto, él está representando fabulosamente su papel, manteniéndonos muy entretenidos mientras las verdaderas batutas que gobiernan México se mueven detrás y provienen de intereses extranjeros.
México... Nos da flojera unirnos, nos da pereza ponernos de acuerdo, necesitamos inundaciones, terremotos o teletones para hacerlo porque al ayudar así nos sentimos buenos. ¿Qué hace falta para sacar nuestra fuerza interior?, ¿Qué se necesita para formar una masa de mexicanos tan grande que nos permita hacer un cambio?, nos molestan las marchas y las manifestaciones de aquellos que sí quieren hacer notar sus inconformidades porque el tráfico se pone infernal y les gritamos ¡Mejor pónganse a trabajar!. De acuerdo pensemos entonces en formas distintas, porque si algo implacable tenemos los mexicanos es nuestra creatividad, ¡Empecemos a organizarnos para algo radical, hagamos una mexicanada histórica! ¿Qué nos detiene? ¿el miedo a perder nuestro trabajo , salir lastimados, o hacer el ridículo? Bueno todo eso ya nos pasa cotidianamente y estamos tan acostumbrados que no nos damos cuenta pero de acuerdo, manifestarse así no es la única forma...
¿Qué pasaría si los mexicanos de abajo nos negamos radicalmente a seguir engordando a los mexicanos de arriba? Se me ocurre que los de abajo que sabemos buscarle y trabajar encontraríamos la forma de no pasarla tan mal y apoyarnos unos a otros pero, ¿los de arriba...?
A ti que te da pena vivir en México, te exhorto a recordar que México es un país maravilloso y de entre todo lo magnífico que existe aquí lo más valioso somos su gente y ese guerrero valiente que todos llevamos dentro y que por ahora el sistema nos lo ha domesticado para mantenerlo dormido. Aporta una idea nueva y comparte eso en tus redes o junta a tu colonia y hagan grupos que ya no consuman productos extranjeros, retomemos la costumbre de ir al mercadito y a la tiendita de la esquina, si nos da miedo hacer algo radical empecemos por lo simple y sencillo pero ¡hagamos algo diferente ya!
Han logrado dividirnos México, es hora de reunirnos y demostrar que sí es un orgullo ser Mexicano.
¡Despierta México, despierta!
Copyright © Elisa Ramírez Solórzano "Ramsol"
